El portavoz de la Santa Sede, Matteo Bruni, confirmó este martes la anulación del Anillo del Pescador y los sellos del papa Francisco, símbolos de su autoridad pontificia, a dieciséis días de su fallecimiento y en vísperas del cónclave para elegir a su sucesor.
El Anillo del Pescador fue oficialmente inutilizado al ser grabada una cruz sobre su superficie con un punzón de metal, en un acto realizado por una especialista cuya identidad no ha sido revelada.
La ceremonia tuvo lugar en una de las reuniones de cardenales en el Aula del Sínodo del Vaticano, bajo la supervisión del cardenal camarlengo, Joseph Kevin Farrell, responsable de la administración durante el periodo de sede vacante.
Las imágenes difundidas por la Santa Sede muestran el momento en que se anulan tanto el anillo como los sellos oficiales utilizados por el papa Francisco para autenticar documentos durante su pontificado.
Esta medida responde al mandato de la constitución apostólica Universi Dominici Gregis, que establece que deben destruirse el Anillo del Pescador y el Sello de plomo tras la muerte del pontífice, con el fin de prevenir cualquier intento de falsificación de documentos papales.
La decisión sobre los tiempos y detalles del proceso fue tomada por los propios cardenales reunidos en las congregaciones previas al cónclave.
El Anillo del Pescador debe ser retirado del dedo del papa una vez confirmada su muerte por el camarlengo, en esta ocasión el estadounidense Joseph Kevin Farrell, lo que simboliza oficialmente el fin de su pontificado.
Con el mismo propósito, tras el fallecimiento del papa argentino el pasado 21 de abril, a los 88 años, el camarlengo y otras autoridades vaticanas procedieron a clausurar su residencia en la Casa Santa Marta, así como su apartamento en el Palacio Apostólico.
Estos espacios permanecerán cerrados hasta que su sucesor, que será elegido por los cardenales reunidos desde mañana en cónclave en la Capilla Sixtina, asuma el pontificado.
El nuevo papa recibirá el Anillo del Pescador y el palio, símbolos de su autoridad, durante la misa de inicio de su pontificado.
