Agentes de la Policía Nacional apresaron a un cubano indocumentado acusado de estafar por un total de 376,128 pesos a distintos establecimientos comerciales ubicados en el polígono central del Distrito Nacional, en los que se presentaba como pelotero de Grandes Ligas.
Se trata de Alejandro David Hernández Castro, de 22 años, quien fue arrestado en la avenida 27 de Febrero con Abraham Lincoln, del Distrito Nacional, al momento de requerirle los documentos de identidad que no poseía en esos instantes.
En ese orden, durante el proceso de depuración, los agentes actuantes se percataron de que Hernández Castro posee dos pasaportes presumiblemente falsos.
Según el reporte policial, el detenido llegó a través de una embarcación marítima a la República de Haití, en fecha no especificada logró ingresar a la República Dominicana.
Asimismo, tres denunciantes, al enterarse de que el extranjero estaba detenido en el Destacamento del Ensanche Naco, se presentaron en calidad de propietarios de establecimientos comerciales que se habían querellado en su contra.
Explicaron que él finge ser un pelotero de Grandes Ligas y que, para causar mayor impacto, se hace acompañar de varios hombres y mujeres a los establecimientos de diversiones y consume hasta saciar las apetencias de todos.
Continúan diciendo que el presunto estafador paga con una tarjeta de una entidad financiera estadounidense que aparentemente el verifone digital aprueba el consumo, pero el dinero nunca cae en la cuenta del establecimiento comercial.
Denuncias
Una ciudadana denunció que Hernández Castro la estafó RD$53,528.20 mediante el consumo de alimentos y bebidas en compañía de varias personas en un restaurante ubicado, en la calle Mustafá Kemal, del ensanche Naco.
También, otro ciudadano presentó otra denuncia en la que indica que el detenido lo estafó con la suma de RD$300,000.00 mediante el consumo de alimentos y bebidas en compañía de varias personas en dos discotecas de su propiedad.
Mientras que otra ciudadana dijo que Hernández Castro la estafó RD$22,600.00, por concepto del pago de un tatuaje que ella le hizo en la espalda, en su establecimiento ubicado en el sector Los Prados.
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