El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, coincidió con su homólogo estadounidense, Donald Trump, en la necesidad de reducir las tensiones con Rusia, aunque sin descartar posibles ataques, durante una nueva visita del mandatario ucraniano a la Casa Blanca.
«El presidente tiene razón (…) y tenemos que detenernos donde estamos», declaró el ucraniano durante una conferencia de prensa en las inmediaciones de la Casa Blanca, tras concluir su reunión con Trump.
Previamente, el presidente estadounidense había afirmado, en referencia al suministro de misiles a Ucrania, que «esperemos que no los necesiten».
«Esperamos que podamos terminar esto sin pensar en hachas de guerra», dijo Trump al iniciar un almuerzo de trabajo en la sala del gabinete.
Afirmó que Estados Unidos requiere los misiles Tomahawk y que una de las razones por las cuales busca poner fin al conflicto en Ucrania es evitar seguir «proporcionar cantidades masivas de armas» a Kiev.
«Nosotros necesitamos los Tomahawk y necesitamos muchas de las otras armas que hemos enviado a Ucrania durante los últimos años», precisó.
Los mandatarios se reunieron por más de dos horas, en una conversación calificada por Zelenski, en sus redes sociales, como de verdadera ayuda para acercar el fin «de esta guerra».
El ucraniano aseguró que se discutió sobre temas clave como «posiciones en el campo de batalla, capacidades de largo alcance y defensa aérea», así como «perspectivas diplomáticas».
«Contamos con la presión de Estados Unidos», expresó el ucraniano para hacer énfasis en que el punto de inflexión es que Rusia «ponga fin a la agresión que inició.
En 2025, Zelenski ha realizado tres visitas a Trump en la Casa Blanca, siendo esta última la que destacó por una mayor coordinación y acuerdos entre ambos, en contraste con la reunión de febrero, cuando el republicano se mofó públicamente de la vestimenta del ucraniano frente a la prensa.