SpaceX realizó un nuevo lanzamiento de su gigantesco cohete Starship en un vuelo de prueba, logrando completar exitosamente medio recorrido alrededor del planeta mientras liberaba satélites simulados, tal como ocurrió en la prueba anterior.
El Starship, considerado el cohete más grande y potente jamás construido, despegó con gran estruendo hacia el cielo del atardecer desde el extremo sur de Texas.
De acuerdo con lo previsto, el propulsor se separó y realizó un descenso controlado sobre el Golfo de México, mientras que la nave alcanzó el borde del espacio antes de caer en el océano Índico. Ninguna de las partes fue recuperada.
«Hey, bienvenido de nuevo a la Tierra, Starship. Qué día», dijo Dan Huot de SpaceX mientras los empleados aplaudían.
Este fue el undécimo vuelo de prueba de un Starship a escala completa, el vehículo que el fundador y director ejecutivo de SpaceX, Elon Musk, planea utilizar para futuras misiones tripuladas a Marte.
Sin embargo, la NASA enfrenta una necesidad más urgente: la agencia no podrá llevar astronautas a la Luna a finales de esta década sin el Starship, una nave reutilizable de 123 metros (403 pies) de altura, diseñada para transportarlos desde la órbita lunar hasta la superficie y regresar.
En esta ocasión, Musk decidió observar el lanzamiento al aire libre en lugar de permanecer en el Centro de Control, como es habitual, afirmando que sería una experiencia “mucho más visceral”.
El vuelo anterior, realizado en agosto, marcó un éxito tras varios intentos fallidos que terminaron en explosiones, y siguió una ruta y objetivos similares. No obstante, en esta nueva prueba se incluyeron maniobras adicionales, especialmente centradas en la nave.
SpaceX llevó a cabo diversas pruebas durante su reingreso sobre el océano Índico, como parte de los preparativos para futuros aterrizajes en el propio sitio de lanzamiento.
Al igual que en ocasiones anteriores, el Starship llevó a bordo hasta ocho satélites simulados que representan a los Starlink de SpaceX.
El lanzamiento se realizó desde Starbase, cerca de la frontera con México, y tuvo una duración de poco más de una hora.