El director de la agencia nuclear rusa Rosatom, Alexéi Lijachov, acusó este viernes a Ucrania de lanzar un ataque con drones contra una planta nuclear situada en la región de Vorónezh, en el oeste de Rusia.
«Anteanoche, aproximadamente ocho drones fueron dirigidos hacia la central nuclear de Novovorónezh. Todos fueron neutralizados y derribados. Sin embargo, algunos restos cayeron y dañaron el sistema eléctrico», afirmó Lijachov a la prensa.
Indicó que «para prevenir posibles incidentes, tres unidades de la central fueron desconectadas de la red y su producción se redujo a menos del 50%».
Lijachov dijo que las reparaciones se realizaron rápidamente y que, para ayer, la planta ya operaba a plena capacidad y produciendo electricidad.
Según el director de Rosatom, se han incrementado los casos de “agresiones” por parte de Kiev contra instalaciones nucleares rusas.
«Claramente, se trata de una respuesta a los éxitos y avances de nuestras tropas a lo largo de prácticamente toda la línea del frente», aseguró.
Lijachov señaló además que ya informó al director general del OIEA sobre la situación de las plantas nucleares rusas.
En relación con la seguridad de la central ucraniana de Zaporiyia, bajo control ruso desde 2022, afirmó que por el momento no son necesarias medidas adicionales.
«En nuestra opinión y la de la OIEA, la seguridad de la central nuclear de Zaporiyia está actualmente bajo pleno control y no requiere ninguna medida adicional», expresó.
Grossi, por su lado, reaccionó a las declaraciones de varios líderes mundiales sobre un posible retorno a las pruebas nucleares y llamó al diálogo para evitar una escalada peligrosa.
«Nosotros, en nombre de nuestro Organismo Internacional de Energía Atómica, promoveremos el diálogo y haremos todo lo posible para fortalecer el régimen de no proliferación, estabilizar y reducir gradualmente las tensiones», precisó.


