El Gobierno puso en marcha la tarde de ayer el Nuevo Modelo de Servicio Policial (NMSP) en la ciudad de Santiago, durante un acto encabezado por la vicepresidenta de la República, Raquel Peña.
La implementación de esta estrategia forma parte del proceso de transformación integral de la Policía Nacional, con énfasis en la prevención del delito, la profesionalización del servicio y una mayor cercanía con la ciudadanía.
La vicepresidenta explicó que, con la puesta en marcha de este nuevo modelo de patrullaje, se inicia una nueva etapa en la historia de la Policía Nacional.
“Es una etapa que pone al ciudadano en el centro, que apuesta por el diálogo, la transparencia y la confianza mutua”, precisó Peña.
En tanto, la ministra de Interior y Policía, Faride Raful, dijo que esta es una oportunidad de acercar la Policía Nacional a las comunidades y permitirá monitorear y evaluar su accionar su abordaje, según la preparación que ya tienen los uniformados a través de la reforma policial y la dirección de transformación de la policía.
Raful aseguró que los cambios no se dan de la noche a la mañana, por lo que dan los pasos de avance para generar transformaciones sostenibles en la institución del orden.
Así funcionará
El Nuevo Modelo de Servicio Policial se desarrolla en Santiago a través de un despliegue estratégico liderado por la Dirección Regional Cibao Central y coordinado por el Departamento S-1, con operaciones en distintos cuadrantes como Reparto Oquet, Caribe Tours, Los Garages, Monumento, Centro Histórico, Ensanche Ortega, La Zurza II, La Trinitaria, entre otros sectores de alta densidad urbana y social.
El dispositivo cuenta con la integración de 230 miembros policiales, entre ellos: cuatro instructores del Centro de Capacitación (CEPOL), tres supervisores zonales, tres comandantes y tres subcomandantes de estaciones de Policía.
Asimismo, incluye 84 patrulleros del servicio regular, 96 agentes asignados al Plan Especial de Servicio de Policía (PESP), 36 policías designados al patrullaje a pie, siete motocicletas y 12 camionetas para patrullaje móvil, además de un equipo especializado en violencia intrafamiliar.
Este despliegue cubre una extensión territorial de 5.56 kilómetros cuadrados, beneficiando directamente a más de 33,000 ciudadanos residentes en los sectores incluidos en el modelo.
