Por: Leanlly Pérez- La apertura del establecimiento “Drink Sinaloa” en el barrio Santa Rosa de Baní ha generado preocupación en la comunidad y entre autoridades locales por la exhibición de figuras de notorios capos del narcotráfico, como Joaquín “El Chapo” Guzmán, Dámaso López Núñez, Ismael “El Mayo” Zambada y Jhon Jairo “Popeye”.
El local, que iniciará operaciones el sábado 6 de septiembre, busca atraer a jóvenes con música urbana y precios accesibles, pero expertos advierten que normalizar la narcocultura puede incentivar el microtráfico, la violencia y la imitación de conductas delictivas.
Autoridades del Ministerio Público, la Alcaldía de Baní, la DNCD y la Policía Nacional han sido llamadas a vigilar la situación y revisar los permisos del negocio, que podría estar incurriendo en apología del delito.
Este fenómeno, que ya se ha visto en México y Colombia con bares, capillas y “narco-tours”, preocupa porque convierte a los capos en ídolos y distorsiona la percepción de riesgo entre los jóvenes, poniendo en entredicho la seguridad y la moral de la comunidad.