Por: Leanlly Pérez- La Asamblea Nacional de Corea del Sur, controlada por la oposición, aprobó por unanimidad la destitución del presidente interino Han Duck-soo, con 192 votos a favor y ninguno en contra. En señal de protesta, los legisladores del partido gobernante optaron por ausentarse durante la votación.
Esta decisión agrava la crisis política que enfrenta el país, marcada por la reciente suspensión del presidente Yoon Suk-yeol, quien enfrenta un juicio preliminar en el Tribunal Constitucional por declarar la ley marcial.
El ministro de Economía, Choi Sang-mok, asumirá temporalmente el cargo de presidente en funciones.
Antes de la votación, Choi había advertido sobre el impacto negativo de esta medida en un contexto de emergencia nacional y alta incertidumbre política.
Mientras tanto, el juicio contra Yoon Suk-yeol avanza, con una primera vista programada para el 3 de enero.
El Tribunal Constitucional tiene hasta el 11 de junio para emitir un fallo sobre si Yoon violó la Constitución al declarar el estado de excepción.
Su destitución definitiva o restitución dependerá de una decisión unánime, ya que el tribunal actualmente opera con solo seis jueces debido a un bloqueo político que impide nombrar nuevos magistrados.
La situación política en Corea del Sur sigue siendo tensa, con acusaciones contra Yoon de haber intentado un acto de insurrección mediante la imposición de la ley marcial el pasado 3 de diciembre.
Aunque revocó la medida horas después de que el Parlamento la anulara, Yoon insiste en que su acción fue un acto de gobernanza para frenar a la oposición, a la que acusa de ser «pronorcoreana» y «antiestatal».
La resolución de esta crisis dependerá del veredicto del tribunal, mientras el país enfrenta una creciente incertidumbre institucional.
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