El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, afirmó este miércoles que la condena de 27 años de prisión por golpismo impuesta a su antecesor, Jair Bolsonaro, constituye «una lección de democracia para el mundo».
Bolsonaro, líder de la ultraderecha, comenzó a cumplir su condena el martes, tras la confirmación de la sentencia por parte de la Corte Suprema, dictada en septiembre pasado, por conspirar para impedir la investidura de Lula tras las elecciones de 2022.
En su primer pronunciamiento público sobre el tema, Lula dijo durante un acto oficial que, con la ratificación de la sentencia, «Brasil ha dado un paso importante» que refuerza la democracia en el país.
«Sin ningún alarde, la Justicia brasileña mostró su fuerza, no se amedrentó con las amenazas de afuera e hizo un juicio primoroso», expresó el mandatario, en clara alusión a las sanciones comerciales y políticas que Estados Unidos le impuso a Brasil por un juicio que el presidente Donald Trump llegó a calificar de «caza de brujas».
Según Lula, el proceso se inició «sin una sola acusación de la oposición», ya que «todas las acusaciones fueron hechas por miembros de la banda que intentó dar un golpe en este país».
Indicó que «por primera vez en 500 años de historia de Brasil, hay un expresidente de la República y varios generales presos por un intento de golpe», lo cual consideró «una demostración de que la democracia y sus leyes valen para todos».
Asimismo, se dijo «feliz», pero aclaró que «no por las condenas», sino porque «este país demostró que está maduro para ejercer la democracia en su más alta plenitud».
Este lunes, junto a Bolsonaro, otros siete condenados comenzaron a cumplir las penas impuestas por la Corte Suprema por el intento de golpe, entre ellos antiguos jefes militares y exministros del gobierno que lideró el dirigente de extrema derecha entre 2018 y 2022.
Bolsonaro inició su condena en instalaciones de la Policía Federal, adonde fue trasladado el pasado sábado desde su domicilio, donde cumplía prisión domiciliaria por haber incumplido varias medidas cautelares, luego de intentar manipular la tobillera electrónica que formaba parte de dichas restricciones.


