Así como los organismos públicos y el Instituto Tecnológico Agrario de Castilla y León (ITACyL) son piezas esenciales para la aplicación de estos programas de agricultura.
Los objetivos clave de esta nueva tecnología son: reducir el consumo de agua, el impacto ambiental y aumentar la producción, en los que los datos y la conectividad son la base de la revolución del sector.
La transformación digital es el proceso en convertir todo el entorno empresarial en datos capaces de ser analizados y explotados.
Si el ser humano es capaz de almacenar y explotar la información aparte de predecir la calidad de la uva, se podrá replicarla.
Con la evolución vienen nuevos ajustes que tienen que ser útiles y aportar valor.
Las tecnologías se han reducido mucho y se están almacenando unas con otras de tal forma que se democratizan y aceleran el uso de ellas.
Otras tecnologías que tienen mayor impacto en el sector vinícola son: el 5G que aumenta la conectividad y genera información en tiempo real.
La información que genera el 5G hace que tengamos cada vez más datos almacenados (Big Data) y mediante un análisis con Inteligencia Artificial y algoritmos se puede interpretar dichos datos para tener una visión de lo que tenemos en el aquí y ahora.
El 5G es una tecnología que va a habilitar a todas las demás, tiene impacto en el resto de tecnologías.
Los dispositivos como aeronaves no tripuladas, sensores remotos, multiespectraules permiten obtener imágenes para monitorizar el viñedo.
Esto permite aplicar diferentes índices relacionados con el estado de las cepas y lograr la optimización del control de las parcelas.
Inteligencia artificial
La Inteligencia Artificial (IA) engloba al Aprendizaje Profundo (DL) y al Machine Learning (ML) y se puede aplicar en imágenes del viñedo.
Esta IA se basa en el entrenamiento de algoritmos basados en árboles de decisión como “Random Forest” o el “See5” .
Tú que opina de este post