Israel se encuentra en una situación de emergencia nacional debido a una serie de incendios forestales que comenzaron ayer en áreas boscosas ubicadas a unos 30 kilómetros al oeste de Jerusalén.
Avivadas por intensos vientos y una sequedad extrema, las llamas han obligado a evacuar a miles de personas, afectado el tránsito en las principales vías, incluida la autopista que conecta Jerusalén con Tel Aviv, y provocado el despliegue de más de 150 unidades de bomberos, personal militar y servicios de emergencia en diversos puntos.
El informe preliminar indica un saldo de 36 personas heridas: 17 bomberos y 19 civiles, en su mayoría afectados por inhalación de humo, según datos del Servicio de Bomberos de Israel y del Magen David Adom (MDA), el principal organismo de atención médica de emergencias del país.
El incendio comenzó la mañana del miércoles en zonas entre Latrun y Beit Shemesh, y se expandió rápidamente a través de al menos once áreas activas, incluyendo Shaar Hagai, Mesilat Zion, Nataf, Yad Hasmona, Neve Ilan, Mevo Horon, Canada Park, Anaba a Latrun, Neve Shalom, Birmania Road hasta el Bosque de Eshtaol, Beit Meir y Shoresh.
De los 119 equipos de bomberos desplegados hasta las 8:00 del jueves (hora local), 23 están trabajando con alta intensidad en Beit Meir y Shoresh, dos de las zonas más afectadas.
Simultáneamente, el ministro de Defensa de Israel, Israel Katz, ordenó al Ejército colaborar con los bomberos en las labores de evacuación, control de accesos y tareas logísticas.
Katz afirmó que el país atraviesa “una emergencia nacional” y solicitó la movilización de todos los recursos disponibles para salvar vidas y contener los incendios.
Además, Israel ha pedido apoyo internacional y ya ha recibido confirmación de la llegada de aviones cisterna procedentes de España, Francia, Rumanía, Croacia, Italia y Ucrania.
Actualmente, doce aeronaves están operando en el terreno, y se espera la llegada de ocho más durante el día, provenientes de Italia y Chipre, para unirse a los esfuerzos de extinción.
Asimismo, se han realizado solicitudes formales de asistencia a Bulgaria y Grecia, países con vasta experiencia en la lucha contra incendios forestales de gran escala.
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