El presidente de Colombia, Gustavo Petro, calificó como un «asesinato» el ataque militar de Estados Unidos contra una embarcación que, según las autoridades estadounidenses, transportaba drogas en aguas del Caribe y en el que fallecieron once presuntos miembros del Tren de Aragua.
«Si esto es verdad, es un asesinato en cualquier parte del mundo», afirmó Petro en su cuenta de X, acompañado de las imágenes del ataque difundidas por el secretario de Estado de EE.UU., Marco Rubio.
Petro, defensor de un enfoque renovado en la lucha contra las drogas, dijo que en Colombia, durante décadas, se ha detenido a los civiles que transportan drogas sin recurrir a asesinarlos.
«Los que transportan drogas no son los grandes narcos, sino los jóvenes muy pobres del Caribe y el Pacífico», aseguró el presidente colombiano.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, afirmó el martes en la Casa Blanca que la Armada estadounidense destruyó un barco tripulado por narcotraficantes en aguas del Caribe, donde en las últimas semanas EE. UU. ha desplegado fuerzas navales con el objetivo de «frenar el flujo de drogas», según Washington.
La Casa Blanca defendió la operación, que incluyó destructores, un crucero lanzamisiles y un submarino nuclear de ataque rápido, como parte de su estrategia antidrogas, y señaló que cuenta con el respaldo de varios países latinoamericanos.
Por su parte, el Gobierno colombiano, que preside temporalmente la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), rechazó el lunes «la lógica de intervención» durante una reunión virtual de cancilleres convocada para analizar el despliegue naval estadounidense en el Caribe, cerca de las aguas venezolanas.


