El gobierno del presidente estadounidense, Donald Trump, anunció este miércoles que asumirá la administración de la estación central de trenes de Washington, Union Station, como parte de su estrategia para reforzar el control sobre la capital en su «lucha contra el crimen».
«Vamos a recuperar la gestión total por parte del Departamento de Transportes y vamos a realizar inversiones para asegurarnos de que esta estación no esté sucia y que no haya personas sin hogar», dijo el secretario de Transportes, Sean Duffy, durante la presentación de unos trenes de alta velocidad en la misma estación.
Según afirmó, buscan hacer de la terminal «un lugar atractivo»: «Hace falta invertir aquí, ha estado descuidado durante décadas y eso se nota. Queremos hacer de este lugar la estación de tren más importante, no solo de América, sino del mundo», recalcó.
«Hoy anunciamos que retomamos el control directo de la estación, no como una maniobra de poder. Siempre lo hemos tenido, pero creemos que podemos gestionar la propiedad mejor, atraer más inquilinos, aumentar los ingresos», reafirmó Duffy.
Aunque la estación central de trenes, Union Station, es propiedad del Departamento, hasta ahora había estado bajo el control de la empresa privada Union Redevelopment y de Amtrak, la compañía pública de transporte ferroviario de EE.UU.
Este movimiento forma parte de la estrategia de la Administración Trump para consolidar su control sobre la capital, lo que ha generado enfrentamientos con las autoridades locales demócratas, así como con activistas y organizaciones que acusan al Gobierno de utilizar su supuesta lucha contra el crimen para detener a migrantes indocumentados.
El 11 de agosto, Trump asumió el control de la seguridad en Washington por un período inicial de 30 días, amparándose en la ley que permite intervenir la autoridad local al declarar una “emergencia” por la elevada criminalidad.
Además, activó a 800 miembros de la Guardia Nacional, que sumados a los efectivos enviados por seis estados gobernados por republicanos, superan los 2,000 agentes solo de esta unidad patrullando la ciudad. Union Station se ha convertido en uno de los principales puntos de presencia militar.
También patrullan la capital la Policía Metropolitana y agentes federales del FBI, la DEA y el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE).
Según la fiscal general Pam Bondi, hasta este martes se habían arrestado 1,178 personas en Washington y se habían confiscado 123 armas ilegales.