El principal aeropuerto de Venezuela, el Simón Bolívar, que sirve a Caracas, no registra para este viernes ninguna salida ni llegada de vuelos operados por aerolíneas internacionales, justo cuando se cumplen dos semanas desde que Estados Unidos emitió una advertencia sobre el espacio aéreo venezolano, lo que provocó una ola de cancelaciones por parte de compañías extranjeras.
En la página oficial del aeropuerto solo aparecen nueve salidas programadas para este viernes: cuatro con destino a Curazao, dos a Bogotá, dos a Panamá y una a Moscú, todas operadas por aerolíneas venezolanas, incluida la estatal Conviasa, responsable del vuelo hacia Rusia.
En cuanto a las llegadas, se registran vuelos procedentes de La Habana, tres desde Curazao, uno de Bogotá y otro de Panamá.
Hace dos semanas, el 21 de noviembre, la Administración Federal de Aviación (FAA) de Estados Unidos exhortó a extremar la precaución al volar sobre Venezuela y el sur del Caribe, al advertir sobre una situación potencialmente peligrosa en esa región.
Desde agosto, Estados Unidos mantiene un despliegue militar cerca de las aguas venezolanas con el propósito declarado de combatir el narcotráfico. Sin embargo, el Gobierno de Caracas sostiene que esta acción constituye una “amenaza” orientada a provocar un “cambio de régimen” tras 26 años de chavismo en el poder.
El pasado fin de semana, el presidente estadounidense, Donald Trump, afirmó que el espacio aéreo venezolano debe considerarse “completamente cerrado”.
En las últimas dos semanas, más de una decena de aerolíneas extranjeras han anunciado la suspensión temporal de sus rutas hacia y desde Venezuela, un país que ya contaba con una oferta limitada de vuelos internacionales directos.
En respuesta, la autoridad aeronáutica venezolana revocó los permisos de operación de Iberia, TAP, Avianca, Latam Colombia, Turkish Airlines, Gol, Air Europa y Plus Ultra. La crisis también afectó vuelos hacia España operados por aerolíneas venezolanas a través de socios comerciales.
Esta semana, las aerolíneas Wingo y Satena (Colombia), Copa (Panamá) y Boliviana de Aviación se sumaron a la ola de suspensiones.
El Instituto Nacional de Aeronáutica Civil (INAC) informó este jueves que espera que Wingo y Copa retomen sus operaciones en un plazo de 48 horas, y aseguró que continuará monitoreando las compañías que aún mantienen vuelos en el país.


