Comunitarios de Cotuí y la empresa Barrick Pueblo Viejo firmaron un acuerdo definitivo para resolver los temas pendientes relacionados con el reasentamiento vinculado a la expansión de la mina Pueblo Viejo, ubicada en la provincia Sánchez Ramírez.
El consenso se logró con la intermediación del Gobierno dominicano, representado por el ministro de Energía y Minas, Joel Santos; la Iglesia católica, a través del obispo de La Vega, monseñor Tomás Morel Diplán, en representación de las comunidades; así como el defensor del pueblo, Pablo Ulloa.
La inversión estimada en el proyecto de reasentamiento superará los RD$20,000 millones e incluirá la entrega de viviendas dignas, acceso a servicios básicos como agua potable, electricidad, educación y salud, así como instalaciones deportivas y la construcción de infraestructura comunitaria, entre ellas un mercado, un destacamento policial, un cementerio municipal y una Unidad de Atención Primaria.
El acuerdo contempla nuevos valores de reposición para seis cultivos establecidos en una matriz de precios, así como el valor de la compensación que se pagará por tarea de tierra.
Además, se incluye un programa de acompañamiento psicosocial, planes de vida familiar, generación de ingresos, educación financiera, y programas educativos orientados a reducir el analfabetismo y mejorar el rendimiento escolar.
En relación con el plan de viviendas, el Estado y Barrick Pueblo Viejo garantizan la provisión de soluciones habitacionales dignas y adecuadas a cada familia, según el censo realizado.
Sobre el acuerdo, el ministro de Energía y Minas, Joel Santos, expresó que «representa un paso trascendental hacia una minería inclusiva y respetuosa de los derechos comunitarios».
«Esta etapa marca el inicio de un nuevo capítulo en la relación entre el desarrollo minero y el bienestar de las personas que habitan estos territorios, reafirmando que sí es posible avanzar con responsabilidad social, diálogo y respeto mutuo», agregó el funcionario.
Tú que opina de este post