En el año 2022, casi 89.000 mujeres y niñas fueron asesinadas en todo el mundo, marcando la cifra anual más alta en veinte años, según un informe de las Naciones Unidas presentado hoy en Viena.
El informe «Asesinatos de mujeres y niñas por razones de género (femicidio/feminicidio)» destaca que más de la mitad de estos casos, alrededor de 48,800, fueron perpetrados por familiares o parejas, evidenciando la falta de seguridad que enfrentan las mujeres y niñas dentro de sus propios hogares.
En promedio, esto representa más de 133 mujeres y niñas asesinadas diariamente por alguien dentro de sus propios hogares. En comparación, solo el 12% de los homicidios con víctimas masculinas ocurren en el entorno del hogar.
La ONU destaca que la mayoría de los homicidios de mujeres tienen motivaciones de género y hace un llamado a los Estados para mejorar sus registros de este tipo de crímenes.
Se observa un patrón de alarma donde, a pesar de una disminución global en el número total de homicidios, se ha registrado un aumento en el número de mujeres y niñas asesinadas en 2022.
Los autores del informe, realizado por la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) y ONU Mujeres, sugieren que estas cifras podrían representar solo una fracción de los casos totales.
«La verdadera magnitud del feminicidio puede ser mucho mayor, ya que la información sobre las motivaciones relacionadas con el género es insuficiente en aproximadamente cuatro de cada diez homicidios de mujeres», señala el estudio.
El informe reveló que en 2022, África superó a Asia como el continente con el mayor número de víctimas totales, alcanzando alrededor de 20.000 casos. Además, es la región con la mayor cantidad de víctimas en proporción a su población femenina, con 2,8 víctimas por cada 100.000 mujeres.
La ONU recalca que sus estimaciones se ven limitadas por la falta de datos disponibles, lo que posiblemente subestime la verdadera magnitud de esta problemática.
En Europa, se ha notado una disminución promedio del 21 % en los casos de feminicidios desde 2010. En América Central y del Sur, también se registraron descensos, con reducciones del 10 % y el 8 % respectivamente, en el número de asesinatos de mujeres.
