El presidente Luis Abinader respondió a las acusaciones del Gobierno haitiano, que hace unos días responsabilizó a la República Dominicana, Estados Unidos y Colombia de agravar la crisis interna de Haití mediante el tráfico ilegal de armas y drogas.
Durante LA Semanal con la Prensa, Abinader reiteró que las autoridades del vecino país deben enfrentar su problema y dejar de culpar a otros países por la crisis que enfrentan.
“Ellos lo que tienen que hacer es enfrentar su problema. Que resuelvan sus problemas. Nosotros lo que estamos tratando es de llamar la atención sobre los problemas que (ellos) tienen”, expresó.
El mandatario reafirmó que su Gobierno está enfocado en proteger la seguridad nacional y que continuará tomando todas las medidas necesarias.
“Ellos tienen un problema grave allá (en Haití) y nosotros tenemos que responder, y yo respondo por la seguridad dominicana y seguiremos tomando todas las medidas de lugar”, subrayó.
Además, el mandatario recordó que las autoridades haitianas deberían agradecer al Gobierno dominicano, que desde 2021 ha insistido ante la comunidad internacional para que intervenga en la situación de Haití.
En cuanto al tráfico de drogas, Abinader afirmó que lo que se ha observado es la entrada de drogas desde Haití hacia la República Dominicana, especialmente marihuana.
Acusaciones de Haití
La declaración de Abinader responde directamente a las declaraciones hechas por el Gobierno haitiano el pasado jueves durante un simposio de alto nivel sobre la crisis de seguridad en Haití, celebrado en la Organización de los Estados Americanos (OEA).
El ministro de Defensa, Jean Michel Moïse, señaló que, a pesar de que Haití no produce armas ni municiones, el país está saturado de armamento pesado que ha sido ingresado por redes criminales transnacionales.
“La República Dominicana, con quien compartimos una frontera larga y vulnerable, se ha convertido en una de las principales rutas de ingreso de armas que terminan alimentando el conflicto armado en nuestro país”, dijo el ministro.
Moïse fue enfático al afirmar que Haití no es productor ni de armas ni de drogas, y señaló que la violencia que afecta gravemente a su población es consecuencia directa de la entrada de recursos ilegales provenientes del exterior.
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