El ministro de Defensa de Israel, Israel Katz, aseguró este martes, durante un acto celebrado en el asentamiento de Beit El, en la Cisjordania ocupada, que el país nunca se retirará por completo de la Franja de Gaza.
«Cuando llegue el momento, estableceremos puestos de avanzada de Nahal (Infantería) en el norte de Gaza en lugar de los asentamientos que fueron desmantelados», afirmó el ministro, según información recogida por el diario israelí Ynet.
«Lo haremos de la manera correcta, en el momento oportuno. Algunos protestan, pero nosotros somos ministros», agregó Katz.
La segunda etapa del plan de paz para Gaza impulsado por el presidente estadounidense, Donald Trump, contempla la retirada completa de las fuerzas israelíes, el desarme de las milicias palestinas, la reconstrucción del enclave y la instauración de un Gobierno de transición.
Uno de los principales obstáculos señalados por Israel para avanzar en su aplicación es la falta de entrega del cuerpo del último rehén israelí.
La primera fase del acuerdo, que comenzó a regir el 10 de octubre, incluía el alto al fuego, así como la liberación de todos los rehenes en poder de Hamás y de prisioneros palestinos detenidos por Israel. También establecía el ingreso de ayuda humanitaria a Gaza.
No obstante, los ataques israelíes no se han detenido por completo: drones continúan sobrevolando el territorio y las tropas disparan contra personas que consideran que se aproximan demasiado.
De acuerdo con el Ministerio de Sanidad de Gaza, el número de fallecidos en la Franja supera los 70,000, mientras que los heridos ascienden a más de 171,000 desde el 7 de octubre de 2023, fecha en la que se inició la actual ofensiva israelí tras un ataque de Hamás que dejó más de 1,200 muertos.
Durante el acto en Beit El, medios israelíes también informaron que Katz se refirió a la decisión adoptada el lunes por el Gobierno de cerrar la emisora de radio Galei Tzahal, gestionada por el Ejército, a la que acusó de haber adquirido un sesgo político.
«He ordenado que los soldados de la emisora se asignen a funciones de combate o de apoyo en combate. Nos faltan soldados; las vacaciones han terminado», indicó el ministro de Defensa sobre una decisión que ha generado fuertes críticas tanto en el Ejército como entre la oposición.
