Por: Leanlly Pérez- Las autoridades portuguesas interceptaron un narcosubmarino con más de 1.7 toneladas de cocaína en el Atlántico central, a unas 1,000 millas náuticas de la costa de Lisboa. Cuatro tripulantes, presuntamente originarios de Sudamérica —dos ecuatorianos, un venezolano y un colombiano— fueron detenidos y puestos en prisión preventiva tras comparecer ante un tribunal en las Azores.
El operativo, coordinado por la Marina portuguesa y apoyado por el Centro de Análisis y Operaciones Marítimas (MAOC) de Lisboa, contó con el respaldo de la Agencia Nacional contra el Crimen del Reino Unido y la DEA de Estados Unidos.
Según las autoridades, el submarino era una embarcación semisumergible de estructura frágil, lo que impidió su remolque al puerto y provocó que se hundiera tras la incautación de la droga.
El jefe de la unidad antidrogas portuguesa, Vítor Ananias, explicó que las distintas nacionalidades de los implicados evidencian que la organización criminal tiene un alcance multinacional. También advirtió que el uso de sumergibles para el tráfico de drogas hacia Europa se ha vuelto una práctica frecuente.
Este hallazgo ocurre en medio de la ofensiva del gobierno de Donald Trump contra embarcaciones vinculadas al narcotráfico, una estrategia que ha sido criticada por líderes latinoamericanos y expertos en derecho internacional tras recientes ataques en el Caribe.


