Por: Leanlly Pérez- Marina Vargas Hidalgo de Payán, conocida artísticamente como Criolla Hidalgo, falleció dejando un legado imborrable en la música dominicana.
La artista, cuya carrera despegó en la década de 1950 en La Voz Dominicana (hoy Radio Televisión Dominicana), destacó por su versatilidad, combinando la ópera con boleros y canciones criollas.
Sus hijos, Milagros Henfield y Sanny Payán, informaron que los restos de la cantante serán expuestos este jueves 11 de septiembre en la funeraria Blandino de la avenida Abraham Lincoln, y posteriormente trasladados al cementerio Higueral de La Romana.
Criolla Hidalgo compartió escenarios con grandes voces de la época, como Napoleón Dimes, Armando Recio y Violent Estefan, y formó parte de la agrupación Los Payán junto a su esposo Chiquitín Payán y su hijo Betico.
Su hermano Reinaldo Hidalgo, también reconocido barítono, fue otro de sus colaboradores en la radio y el Coro Nacional.
Colegas y críticos destacan su capacidad única de interpretar óperas y zarzuelas en sus tonos originales, sin perder la sensibilidad para la música popular, convirtiéndola en una figura emblemática que marcó la historia de la lírica y la canción criolla en el país.
Con su partida, la República Dominicana pierde una voz que supo unir tradición y talento, dejando un legado musical que perdurará por generaciones.