El presidente francés, Emmanuel Macron, advirtió este miércoles que «la ofensiva militar que prepara Israel» en la franja de Gaza podría provocar «un auténtico desastre» tanto para palestinos como para israelíes, ya que arrastraría a la región de Oriente Medio hacia una «guerra permanente».
Macron publicó este mensaje en la red social X después de mantener conversaciones telefónicas con el rey Abdalá II de Jordania y el presidente Abdelfatah Al Sisi de Egipto, dos naciones estratégicas en la región.
«Compartimos la misma convicción: La ofensiva militar en Gaza que prepara Israel solo puede conducir a un verdadero desastre para ambos pueblos y arrastrará la región a una guerra permanente», aseguró el presidente de Francia.
Macron señaló que Francia, Egipto y Jordania coinciden en que el proceso de paz debe contemplar varias medidas, como un alto al fuego duradero en Gaza, la liberación de todos los rehenes en manos de Hamás, el envío de ayuda humanitaria a los habitantes de Gaza, el desarme de Hamás y el fortalecimiento de la Autoridad Nacional Palestina.
Asimismo, recordó que Francia, junto con Arabia Saudí, copresidirá en septiembre próximo en Nueva York una conferencia destinada a avanzar hacia una solución de dos Estados, donde además se formalizará el reconocimiento del Estado palestino.
«Se trata de la única vía creíble para las familias de los rehenes, para los israelíes y los palestinos. No a la guerra, sí a la paz y a la seguridad de todos», agregó.
El pronunciamiento de Macron se produjo un día después de que la presidencia francesa calificara de «abyecta y errónea» la acusación del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, quien, a través de los medios de su país, difundió una carta de protesta vinculando el aumento de actos antisemitas en Francia con el inminente reconocimiento del Estado palestino por parte de París.
Por su parte, el Ejército israelí confirmó este miércoles que ya inició los preparativos para ampliar su ofensiva y tomar la ciudad de Gaza, señalando que la operación se encuentra en su «fase inicial».
Según medios israelíes, los combates podrían prolongarse hasta principios de 2026.