Romero ingresó de forma ilegal a territorio estadounidense el 3 de octubre de 2021, por la zona del Valle del Río Grande, Texas. Poco después, fue detenido por la Patrulla Fronteriza. El 22 de octubre de ese mismo año, recibió una notificación para comparecer ante un juez de inmigración del Departamento de Justicia.
Posteriormente, el 4 de diciembre de 2021, fue arrestado por la policía de Topsfield (Massachusetts) bajo cargos de hurto por más de 250 dólares mediante un esquema único.
En abril de 2022, un juez ordenó su deportación a República Dominicana. Sin embargo, en marzo de 2025, fue nuevamente arrestado por la Policía de Boston, esta vez por posesión y tráfico de drogas con intención de distribución.
Tras su arresto, ICE presentó una orden de detención migratoria ante la cárcel de Nashua Street, la cual fue ejecutada el 6 de marzo. ICE destacó la colaboración de dicha cárcel por dar prioridad a la seguridad pública y evitar tener que realizar una detención en libertad, que habría implicado mayores riesgos.
Finalmente, Romero fue entregado a los agentes de ICE, quienes ejecutaron su deportación el 8 de abril. La directora interina de ICE Boston, Patricia H. Hyde, subrayó que casos como este reflejan el compromiso de la agencia con la seguridad de las comunidades, asegurando que no se permitirá que inmigrantes con historial delictivo continúen representando una amenaza en suelo estadounidense.
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