Por: Leanlly Pérez- La empresa minera Poderosa, responsable de la explotación de una mina de oro en el departamento de La Libertad, al noroccidente de Perú, confirmó el hallazgo sin vida de 13 de sus trabajadores que habían sido secuestrados por un grupo armado en la provincia de Pataz.
Las víctimas eran empleados de un minero artesanal afiliado a la compañía, y trabajaban en un socavón que fue tomado a la fuerza por mineros ilegales en complicidad con bandas criminales.
Según informes proporcionados por la policía y difundidos por la radio local RPP, los cuerpos fueron encontrados dentro del socavón, maniatados, vendados, desnudos y con disparos en el cuello, lo que indica que fueron ejecutados.
El ataque es parte de una creciente ola de violencia que afecta la región de Pataz, donde el crimen organizado ha ganado terreno en los últimos años, infiltrándose en actividades de minería ilegal.
En un comunicado oficial, Poderosa expresó su profundo pesar por lo ocurrido y extendió su solidaridad a las familias de los fallecidos.
Además, denunció que este nuevo hecho eleva a 39 el número de colaboradores, mineros artesanales y trabajadores asesinados por bandas criminales en lo que calificaron como un «territorio sin ley», debido al nivel de inseguridad y al control que mantienen los grupos armados en la zona.
Las familias de las víctimas habían reportado la desaparición de sus seres queridos desde el pasado 27 de abril, cuando perdieron contacto con ellos mientras se encontraban trabajando en la mina.
La tragedia ha generado una gran conmoción en el país y ha puesto nuevamente en evidencia la grave situación de violencia, impunidad y falta de control estatal que afecta a varias regiones mineras del Perú.
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