La Policía Nacional española desarticuló una red delictiva que se dedicaba a importar cocaína desde la República Dominicana a España.
Durante la operación, se decomisaron 8,2 kilogramos de cocaína y se arrestaron a tres individuos, además de imputar a una persona por su presunta participación en delitos relacionados con el tráfico de drogas.
Según la investigación, el líder, establecido en Huesca, reclutaba personas para viajar al país caribeño y llevar esta droga en grandes cantidades oculta en el equipaje. Al regresar a España, utilizaba sus conexiones para distribuir la cocaína en diversas ciudades del país.
La investigación comenzó hace más de un año cuando miembros del Grupo de Estupefacientes de Huesca notaron la actividad de un ciudadano dominicano que reclutaba personas para transportar drogas como «mulas».
Los seleccionados tenían la tarea de viajar a países de Sudamérica y luego regresar a España o a otro país dentro del área Schengen llevando oculta en su equipaje una gran cantidad de sustancias estupefacientes.
La droga iba a ser distribuida tanto en Huesca como en otras ciudades españolas. El reclutador contactaba con individuos de su círculo social de confianza y les ofrecía una suma de dinero a cambio de que realizaran el viaje.
Después de que los reclutas aceptaban trabajar, el investigado coordinaba meticulosamente todos los aspectos necesarios para llevar a cabo la operación con éxito, desde establecer contacto en la República Dominicana para adquirir la droga, organizar los métodos para entregar la mercancía a la «mula» y facilitar su paso por la frontera, gestionar el alojamiento hasta el momento del viaje, comprar los boletos de avión e incluso proporcionar los elementos necesarios para simular un viaje de placer, así como instrucciones específicas a seguir en los controles fronterizos del aeropuerto.
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