Un ataque inesperado por tierra, mar y aire perpetrado por el grupo islamista Hamás ha dejado al menos 40 personas fallecidas y más de 700 heridas en Israel, haciendo estallar este sábado la guerra en la región.
Según fuentes palestinas, milicianos palestinos que ingresaron a Israel tomaron alrededor de 50 personas como rehenes.
Una fuente médica israelí ha confirmado a EFE que el número de fallecidos en Israel ha superado los cuarenta y que los heridos ascienden a más de 740 desde el inicio de la ofensiva de Hamás a primera hora del día, lo que llevado a una escalada bélica sin precedentes ha puesto a las autoridades israelíes en una situación muy complicada.
Se reporta que al menos una decena de palestinos en Gaza han perdido la vida, incluyendo a un periodista y al menos diez milicianos palestinos, cuyos cuerpos fueron devueltos a la Franja después de su incursión en territorio israelí.
Hasta el momento, se informa que al menos 60 milicianos permanecen en territorio israelí y están enfrentándose a soldados y policías israelíes en varios lugares y comunidades cercanas al enclave costero.
Además, se han difundido vídeos que muestran a milicianos palestinos llevando los cuerpos de soldados israelíes fallecidos por las calles de Gaza, donde se observan escenas de celebración en el espacio público.
Las autoridades israelíes han pedidos a los ciudadanos que se queden en sus casa y cierren puertas y ventanas.
«Hoy vemos el verdadero rostro de Hamás, un Ejército terrorista cuyo único objetivo es el asesinato a sangre fría de hombres, mujeres y niños inocentes», dijo el presidente israelí, Isaac Herzo.
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